A lo largo de la historia, el deporte y la tecnología han sido vinculados. No podemos nada contra el progreso y sus avances. Esto a menudo ha permitido a algunas disciplinas de hacer saltos adelante.
La ciencia no deja de hacer proezas en el ámbito del deporte mediante el desarrollo de nuevos materiales. Estos son investigados y construidos para permitir a los atletas
efectuar un resultado inesperado.
Si las innovaciones tecnológicas estarán probablemente exploradas en el futuro principalmente por el rendimiento deportivo, es interesante observar que la herramienta tecnológica es cada vez más utilizado como parte de lucha contra el dopaje. Así, en el ciclismo por ejemplo, el vídeo permite desde hace varios años medir con precisión los rendimientos del ciclo de la fuerza muscular en algunos puertos de montaña de importancia estratégica en la carrera.
Se trata de un dispositivo para la detección indirecta del dopaje, que permite por ejemplo notar las diferencias entre los atletas, sino también entre el rendimiento, de un año a otro, para el mismo atleta.
Inserción de microchips en balones de fútbol, medición técnica del rendimiento, el arbitraje electrónico para la esgrima, el desarrollo de nuevos materiales, la creatividad en los avances técnicos para el futuro del deporte no parece tener límites: para ... bien o para mal?
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